sábado, 22 de enero de 2011

El leñador que se esforzaba demasiado Historia con moraleja


Esta era una vez un hombre que fue a pedir trabajo de leñador a un bosque. El jefe a cargo le dio un hacha y le deseo suerte.
Sorprendentemente el hombre logro cortar 30 árboles en su primer día de trabajo por lo que su jefe lo felicitó y le dijo que estaba a punto de romper el record de 31 árboles.... que había logrado otro leñador.

El hombre, motivado por los comentarios de su jefe, decidió levantarse al día siguiente más temprano para poder superar el record pero lamentablemente ese día cortó solo 17 árboles. Consternado por haber fallado, pensó que además de madrugar debía de esforzarse todavía más por lo que en su 3er día de trabajo se levantó mucho más temprano y empleó todas sus fuerzas pero increíblemente ese día cortó solo 5 árboles.

El hombre no sabía la razón de su fracaso por lo que fue con su jefe para platicarle lo acontecido. El jefe lo escucho atentamente y le dijo: Antes de que sigas quiero hacerte una pregunta: ¿Te has dado tiempo para afilar tu hacha? A lo que respondió el leñador: No, no lo he hecho ya que he estado muy ocupado esforzándome por tratar de cortar mas arboles.

Moraleja: Por más que nos esforcemos para lograr X o Y cosa, si no cuidamos nuestro cuerpo mente y espíritu, nunca lograremos tener y ser todo aquello que deseamos.

Ejemplos de cómo puedes afilar el hacha son:

• Dormir lo suficiente
• Comer saludablemente
• Divertirnos haciendo algún deporte o pasatiempo
• Convivir con nuestros seres queridos
• Leer libros que nos ayuden a lograr nuestras metas.